#9892
Irene Pérez Cañada
Participante

El ritmo adecuado: muchas veces en en día a día por la carga de trabajo y por las prisas, no se presta especial atención a este aspecto que puede ser tanto una práctica potenciadora como detractora. Deberemos prestar especial atención para dar las instrucciones e información al mayor con la cadencia adecuada y mantener siempre en la medida de lo posible un ambiente relajado y adecuado.
Otro ejemplo potenciador de la comunicación sería facilitar que se refiere a calcular el nivel de apoyo que necesita el mayor y proporcionarlo. De esta manera si puede coger una cuchara pero no puede llevársela a la boca, dejar que manipule la cuchara aunque el profesional asista en el movimiento pero no darle directamente de comer por que les hacemos más dependientes, restando autonomía.
Con respecto a los detractores: la infantilización y etiquetar son dos que creo que están muy en el día a día ya que incluso los materiales muchas veces son infantiles y tendemos a justificar y enmarcar todas las actitudes del mayor bajo el paragüas de la demencia, de forma que ni siquiera nos planteamos que determinados problemas de conducta puedan ser resultado de necesidades no cubiertas. Es necesaria más observación y prestar atención en este sentido.