#4417

Prácticas potenciadoras:
1. Respeto- El respeto es fundamental no importa cuán avanzado esté el deterioro cognitivo del participante. Se debe tratar con respeto y dignidad.
2. Validación- Debemos siempre validar al participante, sus sentimientos, emociones y autonomía. No obligarlo a hacer algo que no le gusta, ni poner etiquetas como que es “vago” o “se está haciendo”.

Prácticas detractoras:
1. Infantilización: La infantilización es una de las faltas de respeto más comunes, que en muchas ocasiones nace de la mejor de las intenciones acompañada de falta de educación o desconocimiento. A se confunde el proceso de la retro-génesis de muchas destrezas con el “volver a ser niños”, pero es importante no perder de perspectiva que esa persona no es un niño. Es una persona con una trayectoria de vida y una historia que debemos respetar.
2. Acusar puede tener enormes consecuencias en el estado de ánimo de la persona con demencia, y cuando lo analizamos es sumamente injusto. Las repeticiones, el caminar sin rumbo, los olvidos y muchos otros, son parte del deterioro cognitivo progresivo, del cual la persona no tiene ningún control. Por esta razón es injusto reclamar y acusar a la persona por estas cosas. Las acusaciones frustran a la persona porque no puede controlar sus acciones, pueden provocar problemas de comportamiento y un deterioro en el estado de ánimo.