#4760
Tamara Eiroa Pardo
Participante

Dos prácticas potenciadoras:
1. Ritmo adecuado: Seguir los ritmos de las personas con las que trabajamos y no estar continuamente apurándolos porque hay unos horarios muy estrictos. Por ejemplo: estar aseándose y hacer una supervisión en la que tenga su tiempo para hacerlo de forma calmada y que no esté el profesional apurándolo.
2. Celebración: Celebrar todos aquellos logros que tenga la persona, para así potenciar su autonomía e independencia, motivándola a seguir trabajando. Por ejemplo: si uno de los objetivos es que se abroche los botones solo y lo consigue un día, animarlo y celebrarlo para que lo siga haciendo.

Dos prácticas detractoras:
1. Invalidar: no reconocer la realidad en una situación concreta. Por ejemplo: si dice que se siente solo, contestarle que eso no es así que hay mucha gente con él.
2. Cosificar: tratar a la persona como si fuese una materia inerte. Por ejemplo: cuando se le va a duchar, levantarlo, meterlo a la ducha, ducharlo y no haberle explicado nada o no haber mantenido una conversación con él mientras se le ducha.