#7449

Hablo desde mi experiencia:
– falta de información a la hora de la retirada de sujeciones físicas. En ningún momento se les explicó a las gerocultoras el porqué se hacía. Simplemente que se iban a retirar y punto.
– falta de información sobre cómo evitar las caídas. Las gerocultoras son las que más tiempo pasan con los residentes, necesitan saber qué hacer con todas aquellas personas que ya no llevan cinturón, o que ya no están tomando medicación. Qué hacer con las alteraciones conductuales.
– falta de ganas. No querer salir de la zona de confort. Aquí las sujeciones fueron de toda la vida, desde que se abrió la residencia. A la hora de hablar de su retirada fue una reacción negativa, respuestas como “se van a hacer daño”.
– falta de personal. Creo que es un tema que afecta a más de una residencia: pocas gerocultoras y muchos residentes.

Yo estoy a favor de retirarlas. Hice un máster en gerontología y ACP y las sujeciones no eran parte de la solución, más bien eran el problema. Al entrar a trabajar a esa residencia entré en shock, no podía entender que las usaran, y la normalidad en la que todos las veían.