Identificar: Conociendo a la persona como ser único, de allí que se suma la importancia al conocer su historia de vida, es necesario para profundizar en esa valoración que haremos con total actitud abierta y sin prejuicios. Ejemplo: Conversar con ellos sobre un buen recuerdo que expongan, prestarle verdadera atención y vivenciar esos momentos satisfactorios para ese ser humano.
Integrar: porque cada ser humano merece estar y compartir los espacios de los cuales forma parte, las capacidades o habilidades que se tenga no puede ni debe ser impedimento para ello. Ejemplo: preguntarle qué le gustaría hacer, con cuál de los residentes quiere hablar o caminar.
Imponer: Forzar a un residente por ejemplo a sentarse cuando lo que quiere es caminar, desplazarse.
Acusar: Culpando o regañando por ejemplo a un residente que está en silla de ruedas y éste se haya vomitado sobre su ropa. Conminándole a no hacer eso.
