Buenas tardes, compañeros;
Según mi opinión, todos los principios Montessori se pueden trasladar a las personas mayores (y, por qué no, a la vida en general). Son principios de una filosofía amable, respetuosa, calmada y en armonía, ¿cómo no iba a ser adecuada para alguien?
Además, el hecho de que sea individualizada, que tenga en cuenta que cada persona es única y se adapte totalmente a ella me parece una visión ideal para trabajar con cualquier humano. En el caso de los mayores, tener en cuenta las aficiones que han tenido a lo largo de su vida y su oficio, así como cada aspecto que conforma su historia de vida, hace que se puedan personalizar todas las actividades que se les proponen. Se obtienen, así, actividades significativas. De esta forma, habrá más posibilidades de que acepten participar en ellas, con los beneficios que eso conlleva.
Por otra parte, la importancia que se le da al ambiente en la filosofía Montessori me parece muy acertada. Un ambiente bello y ordenado, con lo necesario para el bienestar de la persona, promueve unos beneficios a nivel psicológico que repercuten, después, en el estado físico y comportamental del mayor.
¿Qué opináis vosotros?
Un saludo,
Sandra Ferreres Monllau
