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Me ha encantado esta lección.
Hace unos años participé en el congreso de Lares en Madrid, en el se impartió un taller por dos chicas que trabajaban en el Pais Vasco en un centro libre de sujeciones. ¡Quede maravillada! es importantísimo que la dirección y el resto del personal del centro esté concienciado y motivado para llevarlo a cabo, en nuestro caso íbamos a comenzar a implantarlo cuando comenzó la pandemia, ojalá retomemos pronto este proyecto.Buenas. Creo que es muy importante la libertad de movimiento para que una persona se sienta completa en todas sus esferas como ser humano. Las sujeciones está claro que impiden que se desarrollo este derecho con las consecuencias físicas y psíquicas que esto tiene. La generalización del uso de dichas sujeciones en centros residenciales de personas mayores, viene dado por un modelo tradicional en el que se fijan los horarios y las estructuras organizativas de los mismos por las prioridades del personal sin dar importancia a los usuarios.
Creo que si es posible puesto que actualmente numerosos centros están dando pruebas de ello y de sus beneficios, aunque para ello creo que se hace necesario un gran cambio de mentalidad por parte de las organizaciones, lo cual pasa entre otras cosas por invertir en formación sobre la retirada de sujecciones y tener unas ratios mayores de personal.
En algunos centros aún no hay posibilidad de aplicar la libertad de movimiento primero por la falta de formación del personal, que asumen que las sujeciones son un método que ya está implementado y que es la alternativa más rápida. Por otro, la falta de personal también es un factor muy importante. Cuando hay un ratio muy alto y la situación cognitiva de los usuarios es muy diversa, hay mucha intranquilidad y miedo a que se caigan. Algunas organizaciones dan prioridad a que como usan las sujeciones, hay menos riesgo de caídas, cosa que es un error.
Particularmente no soy partidaria de las sujeciones pero en el centro donde trabajo siguen implementadas, no es algo de lo que me sienta orgullosa, y evito usarlas cuando los usuarios están conmigo.
Pero el esfuerzo de formar y querer eliminarlas debe llegar desde dirección, que debe encargarse de asumir una formación y quizá el coste de contratar más personal, y eso depende mucho de la organización para la que trabajes y de lo implicados que estén los trabajadores hacia el tema.
Poco se puede hacer si únicamente dos tres personas están a favor del cambio a esta filosofía y el resto no.Sería interesante lograr un centro libre de sujeciones para el 100% de los casos, pero considero que hay que ser realistas y en ocasiones podemos encontrarnos con situaciones o casos en los que por mas que lo intentamos, quizás sea mas beneficioso para la persona una sujeción ya que quizás va a ser lo mejor para su seguridad y salud. Pero siempre y cuando se haya agotado todas las alternativas existentes.
Como comenta Carla Sánchez (previa a mi), otro factor importante es la falta de personal. Por mucha buena voluntad que tenga el personal, si el ratio es amplio, es posible que no exista posibilidad de aplicación.Creo que en algunos centro de mayores no se aplica la libertad de sujeciones porque conlleva a priori un mayor esfuerzo, y a posteriori una mayor vigilancia y seguimientos de los casos en concreto. Esto hace que algunas personas no estén interesadas en quitar dichas sujeciones.
Por desgracia y pese a que pienso que mantener la libertad de movimiento es fundamental, tanto para la persona como para los familiares que sufren de dolor e impotencia al ver a sus seres queridos en esta situación, es algo que, si bien se va instaurando poco a poco, creo que tardará en ser habitual en los centros de mayores al alcance de cualquiera. Pienso así porque no creo mucho en nuestro sistema actual en el que se realizan pocas inversiones y se desperdician los recursos, en muchas ocasiones, en cosas que no son prioritarias en vez de garantizar un final digno a los que, durante toda su vida han estado contribuyendo a la mejora de la sociedad y por tanto, medidas como ésta que requieren una inversión en formación, material, infraestructura, … a veces se ve relegada a centros privados a los que no todos nuestro mayores pueden tener acceso. Aun así, es una labor de todos y hay que confiar en que algún día llegue ese cambio y en ello estamos.
Buenos dias: el uso de sujeciones creo que se debe a un tema de desconocimiento y de cierta comodidad para el personal de trato directo, que por un lado piensan que con éstas, se liberan un poco de la carga de tener que cuidar el riesgo de caidas. Es por esto educar sobre la evidencia que corrobora que estas restricciones no aumentan el uso de caidas y por otra parte procurar el autocuidado para el personal que trabaja con personas mayores.
Sí que es un tema complicado… Desde mi experiencia en centros, siempre me ha dado la sensación de que las medidas de sujección (en algunos casos, claro está) se usan como sustituto de personal que supervise y cuide al mayor. Me refiero a que a veces por la falta de trabajadores que presten su atención a los usuarios provocan que algunos de ellos necesiten una sujección para prevenir caídas o cualquier problema derivado de un tratorno de conducta. Me resulta muy triste pero en ocasiones lo he creído.
Hola!
Considero, como muchas personas ya han aportado, que es posible contar con centros libre de sujeciones porque, de hecho, ya los hay. Pero existen también muchas limitaciones en los centros en los que no hay esa posibilidad. Nos encontramos con profesionales con falta de formación en ello, que en muchos casos presentan burnout laboral por la gran sobrecarga de tareas físicas y mentales a las que deben hacer frente. Además, hacen uso de las sujeciones porque probablemente desconozcan otras formas de abordar la situación. Nos encontramos centros donde las personas muestran una situación de gran dependencia funcional para las AVD, y en donde el personal profesional tiene “miedo” a que se puedan caer por las limitaciones que presentan estas personas. Y por consiguiente, miedo entre los profesionales y desde la propia organización a la apertura de un expediente. Y una forma de percibir que se controla la situación es haciendo uso de sujeciones. De esta forma, se consigue rápidamente controlar la situación. También las ratios actuales no acompañan a facilitar esto que se plantea.
El tema de las sujeciones está tan extendido entre la población que he podido conocer hasta familiares cuidadores que hacen uso de ello en la propia casa.
Creo que es posible un cambio de paradigma para abordar esta situación, pero lo veo complicado si desde la administración pública no se aboga por modelos residenciales de menor capacidad de usuarios y mayor número de profesionales. A veces, pienso que desde dirección también se conoce la situación pero contratar más personal no siempre es posible. Y en algunos casos, hay ganas pero no recursos.Un saludo.
Creo que si sería posible en cualquier caso pero seria necesario adaptar los entornos y ampliar el numero de empleados y la formación del personal.
A mi modo de ver, es lo que debería de llegar toda la comunidad, es verdad que existen algunos casos que no es posible, pero son los menos
pero esto implica tener mas personal al cuidado de los usuariosLa libertad de movimiento no es una realidad aplicada en muchos centros residenciales, aunque sí espero que sea deseada y por tanto sea una tendencia común a corto plazo. A mí no me gustaría sentirme privada de libertad de movimiento de forma involuntaria, motivo suficiente por el que estoy en contra de las sujeciones. En muchos casos, lamentablemente, parece ser complicado tal y como muchos de vosotros ya habéis comentado. Nos vale el ejemplo de aquellos centros que lo logran, es posible por tanto y a ello debemos aspirar. Y estoy segura que compensa, por supuesto, en calidad humana, y trato digno, aunque tristemente, en muchos modelos de centros asistenciales esa mirada está desenfocada…
Es posible y existen evidencias de esto. Si no se aplica es por falta de conocimiento o convencimiento y por el hecho de dejar esta decisión en manos de la buena fe de los profesionales. Ahora por fin se empieza a trabajar a nivel legislativo sobre la supresión de estas medidas que por supuesto es un avance y un paso, pero hasta ahora y hasta que se den realmente ese cambio, muchas personas seguirán sufriendo la sensación de estar privadas de su libertad de movimiento. Debe invertirse en herramientas prácticas, en formación y concienciación que esté al alcance de todo el mundo.
De esta lección, una frase que me ha gustado y me ha hecho reflexionar es que es imposible que las personas mayores no se caigan, sí podemos reducir las consecuencias de estas pero no el hecho de caerse. Me parece que es un objetivo muy importante para trabajar con las familias y con los trabajadores, ya que muchas veces tememos las represalias que puede tener esta caída, ya no tanto por la persona en si que también, sino con las familias.
Esta libertad de movimiento es una realidad a la que debemos llegar todos y es importarte comenzar a ser conscientes de su importancia para empezar a tomar las medidas oportunas como la adaptación del ambiente físico y social.
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