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Yo creo que todas las actividades que se han planteado en cada módulo, según el estadio del FAST, están perfecta adaptadas a las capacidades de los mayores con los que trabajo. Desde hace tiempo he ido poniendo en marcha la integración del material Montessori en las intervenciones, algunos comprados y otros fabricados. Actualmente, trabajo con personas con un FAST 3-4, y he de decir que las actividades que incluyen motricidad fina les encantan. Siempre procuro meterles algún tipo de carga cognitiva (secuencias de colores, copia de patrones, clasificación…). He descubierto que, efectivamente, trabajar con las manos les motiva mucho y que les da igual si es un material comprado o algo que hayamos hemos las terapeutas. Así que estoy muy feliz de haber aprendido cosas nuevas que poder ofrecerles a los mayores.
Si tuviera que elegir algún material sería la tabla del 100 o el tangram, porque me dan mucho juego con cada persona.Yo siempre he pensado que si quieres hacer algo bien tienes que saber qué quieres hacer y cómo quieres hacerlo, por eso me planifico las terapias diariamente. Obviamente siempre ha margen para cambiar las cosas cuando no funcionan. La improvisación, aunque a veces pueda salir bien, es fácil que sea percibida por los usuarios como actividades sin objetivo, que tú se las pones porque sí, sin que sean relevantes.
En nuestro centro de mayores llevamos bastante tiempo introduciendo actividades con metodología Montessori, bien sea comprando el material o fabricándolo y, gracias a que hemos podido recopilar bastantes actividades diferentes, yo me planifico las sesiones teniendo en cuenta un objetivo principal, como pueda ser el de asociación, reconocimiento de números o simplemente buscando trabajar la motricidad fina sin requerir mucha carga cognitiva.
De este modo, recopilé una lista de actividades que trabajan cada uno de esos objetivo con un registro de los días que las han realizado cada uno de los usuarios. Esto permite que las auxiliares que vengan a apoyarme a la sala (porque estoy a la vez con 10-15 mayores) sepan las actividades que pueden facilitarles según mi programación y evita que los mayores repitan todos los días las mismas actividades ya que, en mi caso, algunos de ellos son los que demandan variedad de propuestas y rechazan hacer cosas ya conocidas (están en un FAST 1-4).
Esto es un motivo más para apoyar la planificación de los talleres Montessori, porque en salas con tantas personas, no hay tiempo para la improvisación.Ejemplos de PRÁCTICAS POTENCIADORAS:
– Ritmo adecuado: Respetar el tiempo que necesita para completar una actividad y darle ese espacio y tiempo que precise para promover su autonomía y satisfacción personal.
– Apoyar: Proporcionar seguridad y confianza durante el desempeño de actividades, tanto propuestas por el centro como AVDs, otorgándole así mayor valoración personal.Ejemplos de PRÁCTICAS DETRACTORAS:
– Infantilización: Con mayores con un deterioro avanzado, se acostumbra a usar un tono de voz y un vocabulario infantil, como si no entendieran. Debemos cambiar cualquier signo de infantilización, material, forma de interacción, etc., que tengamos con los mayores y buscar la manera de relacionarnos con ellos mediante el respeto y conociéndoles de manera individual.
– Excluir: Por ejemplo, he observado que con personas que tienen algún tipo de alteración auditiva, se tienen a excluirles dela actividad, en lugar de cambiarles de sitio, hablar más alto o más claro o escribirlo.Hola! Después de esta lección, no concibo la una sin la otra. La Metodología Montessori y el Modelo de Atención Centrado en la Persona buscan sus objetivos de la misma manera, considerando a cada persona única, respetando su situación y dando prioridad a las necesidades individuales de cada una. Yo no trabajo en un centro con acreditación en MACP, pero sí que todos los trabajadores buscamos esa atención específica adaptada a cada usuario y poco a poco se han ido inculcando algunos de los principios Montessori como el papel que tenemos los profesionales, proporcionándoles los medios, dándoles tiempo o no interviniendo salvo que sea necesario.
¡Holaa!
Yo pienso que el principal problema es la falta de información sobre la asistencia a personas mayores sin sujeciones físicas y/o químicas y esto hace muy complicado creer que existen alternativas. Además, si añadimos que es común encontrar centros y residencias en los que hay falta de personal y el trabajo se realiza a contrarreloj para sacarlo adelante, las soluciones que se aplican son sujeciones físicas o aumentos de medicación. Esta mezcla se situaciones es la que propicia un círculo del que parece no haber salida.
Está en nuestra mano buscar esas alternativas y cambiar la manera de cuidar a los mayores. Imagino que habrá casos complicados y que, como hemos visto en la lección, es necesario realizar un análisis exhaustivo y retirar las sujeciones de manera progresiva y con un equipo experto. Seguro que se puede mejorar de alguna manera la situación de todas las personas ya que, como demuestran los estudios, los beneficios que aportan los métodos sin sujeciones son más importantes que los que encontramos al usarlos, especialmente viendo todas las desventajas que producen.Yo estoy de acuerdo con algunos de los compañeros, acerca de que, efectivamente, hay algunos principios que coinciden con los objetivos de la terapia ocupacional (autonomía, individualidad) y, partiendo de eso, deberíamos estar aplicándolos en nuestra práctica con mayores. También asocio alguno de ellos al enfoque de atención centrada en la persona, algo que muchos centros y residencias acreditan estar aplicando sus profesionales. Y, aunque me parecen muy lógicos e ideales, pienso que es complicado llevarlos todos a cabo por la organización actual de centros de mayores y residencias, no por el colectivo en sí. Especialmente, el ambiente preparado y el papel del adulto son dos principios que a mí, personalmente, me cuesta seguir porque las salas son pequeñas, los mayores muchos, a veces no tenemos la ayuda de auxiliares que nos permitan llegar a todo, etc…
Mi conclusión es que, sí es posible generalizar los principios de Montessori al trabajo con personas mayores, en concreto en grupos reducidos o sesiones individuales, pero en grandes centro, sería necesario cambiar algunos aspectos de las organización.
